La Huella de Carbono es la cantidad de gases de efecto invernadero (GEI) que se emiten al realizar una actividad productiva – comercial, durante un periodo determinado, que contribuyen al calentamiento global y al cambio climático. Todos los individuos generamos directa o indirectamente una huella de carbono.
Conocer la Huella de Carbono y lo que significa, sea a nivel empresarial o individual, es muy importante porque nos concientiza sobre cuánto estamos contaminando y contribuyendo al impacto ambiental global. Las consecuencias del cambio climático y el calentamiento global, son problemas que nos afectan a todos y en caso de no tomar medidas relevantes, podrían agravar la situación en el planeta. Conocer cuánto contribuimos al problema, es el primer paso para poder establecer medidas que aporten a la solución. En el caso de las empresas, un beneficio inherente es la eficiencia de recursos, mayor innovación y mejores prácticas productivas. Por otro lado, los individuos pueden tener más conciencia sobre los productos y servicios que consumen e inclinarse por un estilo de vida más sostenible.
Para medir la Huella de Carbono organizacional de una empresa, el primer paso es la definición del alcance del proyecto y el año base a calcular. Existen empresas que se dedican a asesorar y guiar en el cálculo de la huella de carbono. Esto se realiza mediante la recolección de la información necesaria en base a los objetivos y el alcance que busca cada organización. Por ejemplo: Talento humano proporciona el detalle de la cantidad de colaboradores, la distancia que cada uno recorre desde su domicilio hasta la empresa y si se movilizan en transporte público o vehículo propio, y en el caso de este último si la empresa costea la gasolina. El departamento de producción, en el caso de industrias, proveen información sobre usos de combustible (diésel, bunker, biomasa), consumo de energía eléctrica, entre otros.
Al finalizar todo el análisis, se calcula el resultado en toneladas de gases de efecto invernadero (GEI). Es importante a partir de este resultado, evaluar con ayuda de expertos, las recomendaciones para la reducción de emisiones. Por último, la empresa elige un organismo evaluador de la conformidad (OEC), también conocido como auditor externo, para que certifique la medición de la Huella de Carbono. Existen empresas consultoras como Carbono Neutral que acompaña al cliente durante todo este proceso, finalizando cuando ha quedado debidamente certificado.
La normativa ambiental actual ha permitido el desarrollo, continuidad e innovación de los mercados productivos y, así mismo, ha sido eje de la competitividad empresarial; no obstante, el camino para el cumplimiento aún está lleno de oportunidades para mejorar el desempeño y eficiencia de sus procesos, acompañados del compromiso y visión corporativa de las compañías.
Las empresas con prácticas y cultura sostenible son de gran ayuda tanto para el país como para la economía. En primer lugar, este tipo de empresas son responsables en el cumplimiento de la normativa ambiental vigente. Adicionalmente, promueven acciones para reducir el impacto que, sus actividades comerciales, tienen en comunidades y zonas de influencia. Además, la visión sostenible empresarial invertirá en investigación y tecnología que se traducen en eficiencia productiva y le brinda una posición de liderazgo en el mercado, generando más empleo y tributos al Estado. Una cultura sostenible estimula la innovación y la competitividad, resultando en una alta demanda de sus productos y servicios.
La importancia de mantener evaluaciones ambientales radica en el principio de prevención, es decir, el cumplimiento normativo evita sanciones que pudiesen repercutir negativamente en el desempeño de la empresa, y, al mismo tiempo, garantiza la preservación del entorno biótico, abiótico y social.
Artículo desarrollado en base a una entrevista a
Ingeniero Roberto Urquizo
Carbono Neutral
Soluciones integrales para la gestión ambiental eficiente y que contribuyan a la sostenibilidad de las organizaciones.